Nuestra misión es :"Remediar los tres abandonos más perjudiciales de un pueblo,
el de Jesús Sacramentado,
el del cura
y el de las almas."
(Beato Manuel González)

martes, 25 de enero de 2011

Discípulos de Don Manuel González - P. Andrés Ulloa (Ecuador)

1) Breves datos biográficos
Nací en Guayaquil el 27 de julio de 1985. Soy el segundo hijo de cuatro hermanos. Recibí todos mis sacramentos en la parroquia Nuestra Señora de la Alborada donde ayudé como catequista y conocí la Comunidad Misionera Jarcia que me ha acompañado todos estos años; a los 18 años entré al Seminario Mayor de Guayaquil en el 2004. Cuando terminé la filosofía fui enviado a Roma, en el 2007, para estudiar allí el primer ciclo de teología. Regresé al Ecuador en el 2010 y fui ordenado diacono el 20 de noviembre del mismo año. Realizo mi trabajo pastoral en la parroquia Santa Rosa de Lima en Guayaquil y cuento con sus oraciones para mi futura ordenación sacerdotal

2) Cuál sería la principal lección que te dejó tu experiencia de estudiar en Roma?
La necesidad de sacerdotes santos para llevar a los hombres a Dios; en Roma se palpa la universalidad de la Iglesia y te das cuenta de que aun con variantes culturales los desafíos para la evangelización son en el fondo muy parecidos para la Iglesia en cualquier parte del mundo y que la respuesta (la santidad) es la verdadera medida para conocer si se está dando a Dios a los hombres.

3) Cómo conociste al Beato Manuel González?
Había escuchado hablar de él por las publicaciones que circulan en la diócesis pero fue en mi último año de estudios en que leí “Lo que puede un cura hoy” que quedé impresionado.

4) Cuéntanos un poco de lo que experimentaste el día de tu ordenación diaconal
La Ordenación Diaconal
Fue un día con gracias abundantes, había llegado el momento de dar mi sí claro y definitivo y de recibir al Señor como mi todo, era el momento del “matrimonio”. Experimenté mucha alegría y sentí cerca a todas las personas que de alguna manera habían participado a esta aventura que ahora emprendía un rumbo definitivo. Sin embargo, pasar de las emociones de aquel día a la profundización de lo que significaba ser un consagrado del Señor es tarea de todos los días.

5) Qué piensas que te podría haber dicho Don Manuel el día de tu ordenación diaconal?
¡Te quiero Sacerdote-Hostia! (con todo lo que eso significa)

6) Qué es lo que te ha movido a ser Misionero Eucarístico Diocesano?
Poder ayudar a difundir el mensaje que Dios inspiró a Don Manuel y que muestra un camino claro de espiritualidad sacerdotal centrada en Cristo – Eucaristía. Los que estamos en este camino necesitamos de alguien que nos enseñe a recorrerlo y ¡qué mejor que un Beato!

7) Cuáles crees que sean las principales dificultades del clero joven?
Son casi siempre las mismas para todo sacerdote, están todas en el fondo ligadas a la fidelidad al Señor todos los días en todos los aspectos, en otras palabras morir a ti mismo para que viva Él. En los recién ordenados el desafío es imponerse un modelo de sacerdocio, un ritmo y unas metas donde conducirse a sí mismo y donde conducir a las almas.

8) Podrías compartirnos parte de la aventura que estás viviendo en tu nueva misión pastoral?
Con sus padres
Llegamos a la parroquia (el nuevo párroco y yo) a fines de noviembre, el sector (Isla Trinitaria) tiene fama de peligroso y hemos por otra parte constatado que todavía se debe consolidar en muchos la primera evangelización. Ahora estamos en la etapa de conocimiento del sector y de las personas. Estos primeros días han sido ricos de experiencias, la novena de navidad tuvo mucho acogida por parte de los niños los cuales llenaban la iglesia, pero lo sorprendente era que la mayoría llegaban y se iban solos, sin la compañía de ningún adulto.

9) Qué iniciativas estás llevando adelante para promover la devoción eucarística?
Estamos impulsando la Hora Santa de los jueves e intentando cuidar lo mejor posible la liturgia de cada Eucaristía, y cuando se da la oportunidad se predica sobre el abandono hacia Jesús Sacramentado.

10) Sabemos que estás coordinando a las Madres Sacerdotales. Cuéntanos de qué se trata ese camino y cómo está avanzando.
Con las Madres Sacerdotales
Las Madres Sacerdotales son un grupo de señoras que tienen como objetivo rezar y ayudar a los Misioneros Eucarísticos y a todos los sacerdotes. Se reúnen una vez a la semana y se inspiran en la espiritualidad eucarístico - reparadora del Beato Manuel González. Han perseverado por más de seis meses y poco a poco van tomando más iniciativas para dar y buscar compañía a Jesús en el Sagrario

No hay comentarios:

Publicar un comentario